Por Sergio Díaz
29 de noviembre de 2024La Conselleria de Sanidad Valenciana deberá indemnizar con 192.854 euros a los padres de una bebé de seis semanas que falleció tras no ser diagnosticada correctamente en el Hospital La Fe de Valencia. La niña, que padecía una grave taquicardia supraventricular, murió por insuficiencia cardíaca después de que no se le realizaran los controles necesarios ni se le monitorizaran las constantes vitales durante su ingreso en urgencias pediátricas.
La bebé, nacida el 7 de marzo de 2022, ingresó en urgencias el 17 de abril, después de que su madre notara que estaba irritable y con un llanto intenso. Los médicos atribuyeron inicialmente sus síntomas a cólicos del lactante y no tomaron medidas inmediatas para evaluar su estado cardíaco. La niña permaneció ingresada en la unidad de observación desde las 22:16 horas, pero no se le midió la frecuencia cardíaca hasta las 10 de la mañana del día siguiente, cuando el turno de la nueva pediatra detectó que la frecuencia superaba los 285 latidos por minuto.
Durante la noche, no se realizaron controles de constantes vitales ni se llevó a cabo una valoración clínica rigurosa, como han reconocido los informes de Inspección presentados por la Conselleria. La falta de monitorización y el retraso en el diagnóstico derivaron en una insuficiencia cardíaca irreversible.
Estos informes confirmaron que hubo un fallo en la atención: “El daño que, salvo mayor criterio, se considera efectivo y antijurídico es la reducción en las probabilidades de sobrevivir a un cuadro de taquicardia supraventricular en una lactante de seis semanas de vida, debido al retraso diagnóstico y la falta de monitorización adecuada”.
Además, los informes subrayan que, en el caso de la bebé, quien no presentaba patologías cardíacas previas, las probabilidades de recuperación habrían sido del 99,75% si se le hubiera asistido de forma correcta y a tiempo.
La indemnización inicial, calculada conforme al baremo de accidentes de tráfico, podría aumentar un 25% por "perjuicio excepcional", según han solicitado los abogados de los padres, Ica Aznar y Juan Carlos Montealegre Bello, de la asociación El Defensor del Paciente. Esta decisión está pendiente de resolución por parte del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).
A pesar de los intentos del personal médico de salvar la vida de la bebé una vez se detectó la taquicardia, ya era demasiado tarde. Según los informes, medidas tan simples como la aplicación de un paño frío en el rostro podrían haber evitado el desenlace fatal si se hubieran adoptado durante la noche.