Por Julia Porras
10 de marzo de 2023Una joven de 17 años, alérgica a la proteína de la leche, ha fallecido el pasado fin de semana tras ingerir un café contaminado con leche en un bar de Campo de Criptana, en Ciudad Real. Al parecer, la joven, que se encontraba participando en unas jornadas con su parroquia en este pueblo, ingirió un café hecho en una máquina donde se habían hecho antes otros cafés con leche, por lo que el suyo quedó contaminado.
La joven sufrió al poco rato una parada cardiorrespiratoria y, aunque fue rápidamente trasladada por una ambulancia del 112 hasta el Hospital La Mancha Centro, de Alcázar de San Juan, finalmente nada pudieron hacer por su vida y falleció.
Una trágica noticia que podría haberse evitado ya que, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica SEAIC, “hay que recordar a la población general que las enfermedades alérgicas, especialmente si se trata de alergia a los alimentos, los medicamentos, el látex o el veneno de insectos, pueden tener manifestaciones muy abruptas y generalizadas en la persona que las padece. En algunos casos con un desenlace mortal o casi mortal, como desgraciadamente ha sido en este caso”.
Desde la Asociación piden que este tipo de alergias no sean tomadas a la ligera y que se extremen las medidas de precaución cuando una persona alérgica informa y solicita que se tenga cuidado a la hora de evitar un alérgeno en concreto.
Por otro lado, alertan de que “es importante que los propios pacientes, así como todas las personas cercanas a ellos, se aseguren de llevar siempre consigo los medicamentos necesarios para tratar su reacción alérgica, especialmente los auto inyectores de adrenalina, y que conozcan su correcto manejo y en qué momento deben ser administrados”.
La inyección de adrenalina está indicada para personas alérgicas, no para intolerantes, “por eso, una persona que tiene conocimiento de ser alérgica, debe llevar una encima siempre”, aclara el director médico de Medicina Responsable, el doctor Pedro Gargantilla. Y es que, el proceso que se desencadena cuando una persona alérgica toma cierta cantidad del alérgeno lleva unos pasos, que duran pocos minutos, pero “que son determinantes para saber que esa persona está próxima a sufrir anafilaxis”, explica el doctor Gargantilla.
Pero ¿qué sucede en el organismo cuando una persona alérgica toma el alérgeno? Según el doctor Gargantilla, “lo primero que se ve afectado es la piel, aparece urticaria, picor y enrojecimiento en diferentes zonas del cuerpo. Después, la tensión arterial empieza a bajar y aparece el mareo. En tercer lugar, se inflama la lengua y las vías respiratorias se cierran, el pulso se vuelve débil y la persona se torna pálida. En ese punto pueden aparecer vómitos o náuseas y al final la persona se desmaya y entra en parada cardiorrespiratoria, lo que se conoce como shock anafiláctico.
“Es una cuestión de minutos, si no se actúa en el momento en que empiezan aparecer las lesiones cutáneas, que son los primeros síntomas, inyectando la adrenalina en la parte externa del muslo, es muy probable que muera”, dice el doctor Gargantilla, como desgraciadamente ha sucedido.