
Por Medicina Responsable
26 de noviembre de 2025El Ministerio de Sanidad ha celebrado un Taller Nacional en el marco del Plan de Aceleración de la OMS para detener la obesidad con el objetivo de analizar la respuesta de España frente a esta patología. Durante el encuentro, la directora del Departamento de Nutrición y Seguridad Alimentaria de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Luz María De-Regil, ha anunciado que se está trabajando para celebrar en España una cumbre global sobre obesidad en octubre de 2026.
"España ha liderado distintos eventos y esperamos que en el 2026 se pueda celebra una primera reunión de alto nivel político para hacer una evaluación de la obesidad", ha apuntado De-Regil. Además, ha detallado que la cumbre servirá para medir los frutos del Plan de Aceleración y “evaluar qué hemos aprendido y qué más se puede hacer”. En esta línea, ha incidido en la conveniencia de compartir aprendizajes entre países, destacando el “relevante papel” que ha tomado España para avanzar en este campo.
La jornada celebrada en el Ministerio ha servido también para repasar los planes del Gobierno en esta área y la evolución e incidencia de la obesidad infantil. España está entre los países con mayores tasas de obesidad infantil, al nivel de otros países mediterráneos como Chipre, Grecia, Italia o Malta, según los resultados 2022-2024 del sistema de vigilancia COSI de la OMS. Este informe sitúa la incidencia del sobrepeso y la obesidad en un 20% de los jóvenes de 5 a 19 años, unos 390 millones de jóvenes en todo el mundo.
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha advertido que “actuar con urgencia no es una opción: es una responsabilidad pública de primer orden”, y ha señalado que “ocho de cada diez niños con obesidad seguirán viviendo con ella en la edad adulta”, con mayores riesgos de enfermedades cardiovasculares, diabetes y trastornos de salud mental.
El enfoque del Gobierno se centra en los determinantes sociales de la salud. La obesidad infantil, ha recalcado la ministra, “es el síntoma visible de un problema más profundo, relacionado con los determinantes sociales de la salud”, como el acceso a alimentos saludables, la precariedad y las desigualdades.
Según la Encuesta de Salud de España 2023, “la obesidad infantil tiene un marcado componente social” y “en las familias con menor renta, los niños tienen el doble de probabilidades de desarrollar obesidad”. "Entre las familias con ingresos inferiores a 18.000 euros brutos al año la prevalencia del exceso de peso es de un 48%, mientras que las familias con más de 30.000 euros el porcentaje es del 29%", ha ilustrado el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy.
Ambos dirigentes han resaltado los avances puestos en marcha por el Gobierno, aunque subrayando la necesidad de llevar la respuesta más allá. En este punto, el ministro ha subrayado que el Gobierno aprobó un real decreto para garantizar que todos los niños tengan cinco comidas saludables a la semana en los centros escolares.
Pese a ello, ha asegurado que se deben tomar más medidas para continuar reduciendo la obesidad infantil en el país. Así, ha destacado que el último Estudio ALADINO muestra un dato positivo con el descenso de cuatro puntos y medio en los índices de prevalencia de exceso de peso en la población infantil. En esta línea, ha destacado el Plan Estratégico Nacional para la Reducción de la Obesidad Infantil (PENROI), en el que están implicados 18 ministerios y que incluye más de 200 acciones.
“No hablamos solo de salud pública, hablamos de justicia social. Hablamos de igualdad de oportunidades. Hablamos del derecho de cada niño y cada niña a crecer con salud, sin que su código postal ni su nivel de renta marquen su destino”, ha afirmado García. España continuará su labor con ambición para “hacer de nuestro país un ejemplo internacional en la lucha contra la obesidad infantil”, ha concluido.