Las enfermeras geriátricas vascas rechazan que los auxiliares realicen funciones de enfermería

El Gobierno Vasco ha creado un borrador para la reforma del decreto de residencias de Euskadi. En este documento, entre otros puntos, se permitiría la contratación de auxiliares para realizar funciones propias de Enfermería.

Los Colegios Oficiales de Enfermería de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa han solicitado oficialmente a las responsables de los departamentos de Salud e Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, el citado borrador para poder realizar las aportaciones y correcciones que correspondan, para que la norma se ajuste a la legislación vigente.

La reforma, que ha dado su primer paso -ya que ha sido firmada por la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa-  deberá pasar por Consejo de Gobierno, pero de ser aprobada, “autorizará a recurrir a otros perfiles sanitarios de manera provisional y hasta tres años ante la escasez de enfermeras que deseen trabajar en un recurso de estas características, toda vez que hayan demostrado fehacientemente que han resultado infructuosos los esfuerzos de búsqueda y contratación de personal sanitario”.

A falta de conocer en detalle el borrador de la reforma -de la que los Colegios de Enfermería vascos han tenido conocimiento por la prensa-, los tres Colegios manifiestan y recuerdan que “es ilegal que funciones de profesionales de Enfermería sean desarrolladas por otros perfiles sanitarios que carecen de la capacitación y titulación requerida para ello”. Además, inciden en que las administraciones “deben poner en valor el trabajo desarrollado por el colectivo de enfermeras y médicos en las residencias en todas sus dimensiones” y que la complejidad del perfil del usuario de residencias, personas mayores y grandes dependientes, requiere unos cuidados sanitarios de calidad prestados por profesionales capacitados.

En la misma línea se encuentra la opinión de las enfermeras activas en residencias del País Vasco. “Las funciones de las auxiliares son muy importantes, van desde realizar la higiene de los pacientes hasta darles de comer, son las que están más cerca de los ancianos, pero de ahí a que puedan poner una vía subcutánea, o a valorar la cura de una úlcera de presión, por ejemplo, va un mundo”, dice Maite, enfermera en una residencia de San Sebastián.

Las enfermeras afirman que las auxiliares pueden llegar a aprender alguna cosa por observación de su trabajo, pero realmente “no están capacitadas porque les faltan conocimientos teóricos y prácticos. Tampoco podrían legalmente ejercer de enfermeras. Son dos puestos totalmente diferenciados, con muy distintas funciones”, aclara Maite.

La solución a la falta de personal no parece, por tanto, suplir esas carencias con otro tipo de personal, sino “mejorar las condiciones laborales de las enfermeras que trabajan en residencias para que quieran ir a trabajar allí”, concluye Maite.

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