Por Virginia Delgado
4 de junio de 2025La actividad de donación de órganos en España ha experimentado un crecimiento muy significativo en la última década. En 2014, se registraron 1.682 donantes y, en 2024, 2.562, una cifra que ha supuesto un incremento del 52%. En total, el número de personas registradas en estos diez años ha sido de 23.064, y el número de trasplantes que se han realizado gracias a su generosidad, 52.634.
Estas cifras suponen una tasa, sólo el año pasado, de 132,8 donantes por millón de habitantes (p.m.p), en un año en el que la actividad en los quirófanos aumentó un 10%, con un total de 5.961 procedimientos completados según la Organización Nacional de Trasplantes (ONT).
Durante el Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos, que se celebra este miércoles, la ONT ha resaltado la labor que realizan los 145 hospitales que no tienen programa de trasplante. Así, ha destacado el papel de los coordinadores calificándolo de “imprescindible para el crecimiento experimentado en la última década”. En estos centros y durante este tiempo, han sido 8.821 las personas que han donado órganos, lo que representa el 38% del total. Su gesto ha hecho posible que se realizaran 20.040 trasplantes; concretamente, 11.806 renales, 5.058 hepáticos, 1.794 pulmonares, 1.076 cardíacos, 293 de páncreas y 13 intestinales.
El trabajo que realizan los coordinadores de trasplante en estos centros hospitalarios es identificar a posibles donantes, entrevistarles y apoyar a sus familias durante el proceso de duelo y toma de decisiones. Su labor finaliza con el traslado de los órganos a los hospitales trasplantadores.
El perfil del donante ha experimentado un cambio con el paso de las décadas. A principios de siglo, el 20% de las donaciones se producían tras un accidente de tráfico, normalmente, de una persona joven. Hoy en día el perfil es completamente diferente, siendo el 60% personas de más de 60 años, el 31% de más de 70 y el 5%, octogenarios. Este cambio ha hecho que el Sistema Nacional de Salud (SNS)haya tenido que adaptarse a un perfil que, en comparación con otros países, es completamente distinto.
Sin embargo, el de los donantes en los hospitales que no tienen programa de trasplante difiere con respecto a los centros trasplantadores. Según datos de la ONT, tiene una edad media de 59 años. En cuanto a las causas de su muerte, el mayor porcentaje (un 63%) está entre los que fallecen por accidentes cerebrovasculares, y el menor (12%) en los fallecidos por traumatismo craneoencefálico. La ministra de Sanidad, Mónica García, también ha reconocido el trabajo de los hospitales donantes no trasplantadores. “Son imprescindibles en la elevada actividad de donación y trasplante de nuestro país. Sin ellos, muchas personas no tendrían la oportunidad de ser donantes al final de sus vidas, ni muchos pacientes lograrían esa segunda oportunidad que supone el trasplante”, ha manifestado.
Por otro lado, la ministra ha destacado la generosidad de los donantes y de sus familias. “En el trágico momento que supone la pérdida de un ser querido, dicen sí a la donación”, ha concluido.
Los diez centros no trasplantadores que registraron mayor actividad de donación de órganos en la última década han sido los hospitales universitarios de Navarra, Cáceres, Castellón, Donostia, León, Álava, Valencia, Burgos, Torrecárdenas y Virgen de la Victoria de Málaga.