Por Santiago Melo
30 de junio de 2025La pérdida de peso en hombres con sobrepeso puede tener efectos muy positivos en su salud sexual, más allá de los beneficios generales ya conocidos. Diversas investigaciones han demostrado que adelgazar repercute favorablemente en el equilibrio hormonal, la circulación sanguínea y la autoestima, factores clave para mejorar la calidad de las relaciones sexuales y el bienestar íntimo.
La obesidad, especialmente cuando se concentra en el abdomen, está estrechamente relacionada con alteraciones hormonales. El exceso de grasa corporal puede aumentar los niveles de estrógeno y reducir la testosterona, la principal hormona sexual masculina. Este desequilibrio no solo disminuye el deseo sexual, sino que también afecta la capacidad de mantener una erección firme. Además, la acumulación de grasa y el daño a los vasos sanguíneos limitan el flujo sanguíneo hacia los órganos sexuales, lo que agrava los problemas de erección.
Pero las implicaciones van más allá de lo fisiológico. La obesidad también está vinculada con una peor salud mental. La ansiedad, baja autoestima o depresión son factores frecuentes en hombres con sobrepeso, y todos ellos pueden interferir en su desempeño sexual. Por el contrario, perder peso puede mejorar la autopercepción, la confianza personal y la disposición a mantener relaciones íntimas, lo que se traduce en un mayor bienestar emocional y sexual.
La mejora hormonal tras adelgazar, unida a una mejor circulación sanguínea y una reducción de la inflamación, puede restaurar el funcionamiento normal del eje hormonal masculino. Esto incluye no solo un aumento de la testosterona, sino también una mejora de la libido y de la respuesta sexual. Además, al reducir el perímetro abdominal, se alivia la presión sobre el sistema respiratorio, lo que contribuye a reducir trastornos como la apnea del sueño, que también está asociada a fatiga crónica y descenso del deseo sexual.
Por otro lado, la pérdida de peso contribuye a mejorar la resistencia física, la movilidad y el estado de ánimo, elementos que inciden directamente en la calidad y frecuencia de las relaciones sexuales. Una mayor vitalidad y energía física permite disfrutar más del encuentro íntimo y favorece una experiencia más satisfactoria.
Es importante entender que los resultados no son automáticos ni iguales para todos. El estilo de vida, la calidad de la relación de pareja, la salud emocional o el conocimiento en salud sexual también juegan un papel importante. Aun así, mantener un peso saludable mediante una alimentación equilibrada, la práctica regular de ejercicio y la incorporación de hábitos saludables puede marcar un antes y un después en la vida sexual del hombre con sobrepeso.
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