Si bebes, no conduzcas; y si te medicas, cuidado con estos fármacos

Para el puente de agosto, que comienza el próximo jueves 15 y concluye el domingo 18, la Dirección General de Tráfico (DGT) prevé unos 8,3 millones de desplazamientos por todo el territorio nacional. 

A los que lo aprovechen para escapar unos días de la rutina y disfrutar de ocio y descanso, se les unirán, en la carretera, aquellos que comienzan sus vacaciones y los que las terminan. De entre todos ellos, habrá conductores que tomen medicamentos que puedan generar efectos o interacciones que influyen en la capacidad de conducción.

Aunque es imposible saber la cifra de las personas medicadas que se pondrán volante durante el puente de agosto, los datos que ha dado el Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF) nos avisan de que serán muchísimas . “Un 17% de las personas que conducen lo hace bajo tratamiento farmacológico. Hasta 5.400 presentaciones comercializadas y dispensables en las farmacias comunitarias tienen propiedades adversas en el manejo de vehículos; esto es uno de cada tres medicamentos”, ha informado esta entidad.

Respecto a los accidentes en carreteras españolas relacionados con la ingesta de fármacos, “se aproxima al 5%”, añade el CGCOF.  La mayoría de ellos se producen porque los conductores sufren somnolencia, reducción de reflejos, visión borrosa o mareos después de tomar fármacos, como antigripales, ansiolíticos, antidepresivos o analgésicos.

Siempre es importante leer los prospectos de los medicamentos, pero quizá más si se va a conducir.  Cuando afectan al manejo del vehículo, tienen impreso un pictograma de un coche negro sobre fondo blanco en el interior de un triángulo rojo.

¿Cómo afectan?

Además de los efectos citados, el consumo de fármacos también puede producir sensación de relajación y aumento del tiempo de reacción, además de afectar a la percepción de las distancias y provocar alteraciones visuales o auditivas. No obstante, el Consejo General de Colegios Farmacéuticos ha manifestado que no a todas las personas que están bajo tratamiento la medicación les produce un efecto negativo en la conducción. “Si está bien tomado, el fármaco permite controlar la patología y mejorar la capacidad del paciente al conducir”, ha señalado.

Por otro lado, se ha de tener especial precaución cuando se toman varios medicamentos de forma conjunta. “Existe el riesgo de que puedan interaccionar entre sí y provocar determinadas alteraciones en nuestra salud. Asimismo, algunos incluyen alcohol en su composición”, ha añadido el CGCOF.

Grupos de medicamentos con mayor efecto 

Esta entidad ha elaborado la siguiente lista de grupos de fármacos que afectan negativamente en la conducción:

• Hipnóticos. Usados para trastornos de sueño como el insomnio. por ejemplo, medicamentos con melatonina, doxilamina o zolpidem.
• Ansiolíticos. Tratan la ansiedad y, en ciertos casos, el insomnio. Son las benzodiazepinas como bromazepam, lorazepam o diazepam.
• Antidepresivos; amitriptilina o fluoxetina y similares.
• Medicamentos empleados en el tratamiento de gripe o catarros, como la clorfenamina o el dextrometorfano.
• Algunos analgésicos usados para abordar el dolor, como los opioides.
• Fármacos antialérgicos o antihistamínicos recetados a personas con alergias primaverales, como ketotifeno o dexclorfeniramina.
• Antiepilépticos; valproato o carbamazepina, entre otros.
• Medicamentos para tratar el párkinson (levodopa o apomorfina).
• Fármacos frente a trastornos psicóticos, por ejemplo, el trastorno bipolar o la esquizofrenia, como olanzapina o quetiapina.
   

---