logo_medicina
Síguenos

Gestión del estrés y ansiedad, asignaturas pendientes de la EvAU

Estos son los dos principales estados con los que conviven los estudiantes que se enfrentan a esta prueba. Aprender a gestionarlos es primordial para rendir durante el aprendizaje y los exámenes

Compartir
Gestión del estrés y ansiedad, asignaturas pendientes de la EvAU

Por Virginia Delgado

31 de mayo de 2024

Alba acaba de cumplir 18 años y ya se enfrenta a su primer gran reto como mayor de edad. La próxima semana se examina de las pruebas de acceso a la universidad (EvAU o EbAU, según la comunidad) y es consciente de que los resultados le cambiarán la vida. No obstante, reconoce que no está muy agobiada y no siente presión. “Pensaba que lo iba a estar más. Creo que a estas alturas estoy agotada de todo el curso. Ha sido duro. Tienes la sensación de que estudias mucho y no sacas las notas que mereces, y esto provoca bajón”, comenta a Medicina Responsable. 

Lo primero que se encuentran los alumnos de 2º de Bachillerato al cruzar el aula en septiembre es la palabra “EvAU”. A partir de ahí, y durante nueve meses, este vocablo está constantemente en su día a día. ¿Esto es bueno o sería preferible no recordárselo continuamente para que rindieran más? La psicóloga clínica Elena Daprá considera que a los estudiantes se les debe hablar de ello desde el principio de curso. “No se les puede quitar las cosas que les va a suceder, porque estaríamos evitando que tengan tolerancia al estrés y a la frustración. Van a tener un examen y van a sentir ambas cosas. Un estrés sano puede ayudar a desarrollarse e incluso potenciar”, explica.

La estudiante Alba ha sido testigo de situaciones extremas en su clase. “Muchos de mis compañeros han llorado del agobio que tenían, hasta el punto de llegar a desquiciarse”, dice. Como explica Elena Daprá, los síntomas que han podido experimentar estos jóvenes son tanto físicos como cognitivos. “Los chicos viven todas las sensaciones que tienen que ver con el nerviosismo y la agitación; como sudoración, temblores, hiperventilación (respiración acelerada), sensación de mareo… Son fáciles de reconocer y, por tanto, pueden controlarse y gestionarse”, señala. 

En cuanto a los síntomas cognitivos, los estudiantes que se enfrentan a la EvAU pueden tener sensación de pesadez mental, falta de creatividad y disminución de rendimiento. “Les cuesta más retener y concentrarse, y su consecuencia es que hay un mayor número de errores. Por otro lado, hay sensación de que todo es repetitivo y esto genera bloqueos y pensamientos negativos del tipo ‘no soy capaz, qué va a pasar conmigo’”, añade la psicóloga.

Estrés insano

Estas emociones están dentro de lo que los profesionales denominan “estrés insano”, que se produce en distintas fases. La primera es la reacción de alarma; la segunda, de resistencia; y la tercera, de agotamiento. “Al principio, nos percatamos y nos disponemos a responder a ello, después, nos resistimos a tener las sensaciones físicas que estamos experimentando y que no nos gustan. Finalmente, hay una habituación a los niveles de estrés y, conforme se acercan las fechas de los exámenes, pasamos a la resensibilización”, comenta Elena Daprá.

Para controlar el estrés y la ansiedad, la psicóloga clínica recomienda asistir a cursos de gestión e inteligencia emocional durante meses antes de la prueba para, así, tener tiempo para su aprendizaje. “Esto no se puede interiorizar tres días antes del examen”, dice. 

Lo ideal sería que los alumnos tuvieran estos recursos en sus centros escolares, pero pocos cuentan con él. Y es que, como explica Daprá, “en algunos trabajan psicólogos educativos y, generalmente, no están formados ni son especialistas en gestión de estrés. Lo más idóneo es que los estudiantes trabajen con psicólogos sanitarios y, también, dedicar horas de tutoría”. 

Los buenos resultados de los exámenes siempre tienen detrás horas de estudio bien aprovechadas. Pero hay jóvenes se ‘ayudan’ ingiriendo pastillas que ayudan a concentrarse. “Mucho cuidado con los medicamentos, habría que valorar para qué y cómo se toman. Siempre tienen que ser recetados por un médico. No se necesita algo externo, si hay una sana gestión del estrés. Si aprendo técnicas y estrategias psicológicas, no preciso ninguna medicación”, concluye la psicóloga Elena Daprá. 



Te puede interesar
modelos-3d-sarcoma-ewing
Investigadores emplean modelos 3D para definir la agresividad en el sarcoma de Ewing
sanidad-luz-verde-observatorio-contra-fraude-corrupcion-sanitaria
Sanidad da luz verde al Observatorio contra el Fraude y la Corrupción Sanitaria
elaboran-el-primer-atlas-del-micobioma-del-cancer-1664533719862
Elaboran el primer Atlas del Micobioma del cáncer