Por Pedro Martínez
11 de diciembre de 2024Junts y PNV, ambos socios del actual gobierno de Pedro Sánchez, se han unido al PP y Vox para tumbar una proposición de ley presentada por PSOE y Sumar en el Pleno del Congreso de los Diputados. Esta iniciativa pretendía permitir a las personas mayores de edad que lo necesiten expresar anticipadamente su voluntad sobre los cuidados y el tratamiento asistencial en el final de su vida.
Caridad Rives, diputada del PSOE en el congreso, fue la encarda de presentar la propuesta ante el hemiciclo en el Pleno celebrado ayer martes. La iniciativa trataba de establecer una nueva regulación sobre las instrucciones previas a los cuidados paliativos tratando de alcanzar diferentes objetivos. Por un lado, incorporar la petición anticipada de la ayuda para morir en las situaciones que son motivo para realizar esta solicitud, adecuándose a la Ley Orgánica de Regulación de Eutanasia. Por otro, otorgar mayor seguridad jurídica a los profesionales que apliquen la eutanasia, aportándoles mayor seguridad jurídica regulando que las instrucciones previas se produzcan dentro de los límites legales y eliminando la referencia a la ‘‘Lex artis’’.
Los resultados de la votación determinaron el rechazo del hemiciclo a tomarla en consideración poniendo fin a su tramitación parlamentaria. La iniciativa sumó 162 votos, pues el PSOE logró el apoyo de Sumar, ERC y Bildu, entre otros aliados del Gobierno, pero fueron insuficientes frente a los 180 votos que sumaron el PP, Vox, Junts y el PNV.
Lourdes Méndez, diputada de Vox, ha aprovechado su turno de palabra para expresar el rechazo del partido, criticando especialmente que esta decisión la tome el enfermo ‘‘en un contexto asistencial de desamparo’’, algo que califica de ‘‘auténtico disparate’’. ‘‘Defender la vida no es defender el dolor. Existen medios para paliar el dolor y el sufrimiento, como la sedación paliativa para procurar una buena muerte cuya intención no es matar al enfermo’’, ha añadido.
En esta misma línea, Marta González, diputada del PP, ha asegurado que el texto es ‘‘innecesario por redundante e inoportuno y no aporta ninguna nueva garantía a los pacientes’’. ‘‘Además la desaparición de la Lex artis pone de manifiesto la enorme desconfianza y recelo que el Gobierno y el Grupo Socialista sienten frente al personal sanitario español’’, ha criticado.