Por Clara Bravo
27 de agosto de 2025No me gustan las prohibiciones. Por ejemplo, tengo un rechazo intenso por los tatuajes, pero jamás apoyaría su prohibición, porque hasta los gilipollas tienen derecho a ser libres. ¿No tienen derecho al voto muchos ciudadanos de cerebro estropeado? Pues lo del tatuaje es mucho menos importante.
Pero a pesar de que no me gustan las prohibiciones, estoy de acuerdo con la prohibición que la plataforma Kick le ha puesto a la cuenta SS Conexion, una pareja de influencers españoles, que han hecho de todo (hasta beber orina), pero que llegaron a consumir droga en directo.
Ya sé que hay quienes hasta son partidarios de la venta libre de drogas, pero es un contrasentido que esté prohibido el anuncio de bebidas alcohólicas (cuyo consumo es legal) cerca de las escuelas, y el alumno de esa escuela pueda ver, en su móvil, cómo estos dos desviados -chica y chico- se meten droga por la nariz o por la boca.
Que se la metan por donde quieran (hay otros orificios en el cuerpo humano) pero en privado.