España, sin atención psicológica

Una de cada cuatro personas tendrá un problema de salud mental a lo largo de su vida y en 2030 las enfermedades mentales serán la primera causa de discapacidad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Actualmente, entre el 2,5% y el 3% de la población adulta padece un trastorno mental grave en nuestro país y entre el 20% y el 25% de las consultas en atención primaria, como asegura el director médico de Medicina Responsable Pedro Gargantilla, son sobre problemas de salud mental. Sin embargo, a pesar de los datos, España es uno de los países europeos con un menor número de psicólogos clínicos por habitante, solo seis por cada 100.000, tres veces menos que la media de la Unión Europea. Además, un 40% de los hospitales públicos no dispone de esta figura.

Esto significa que estamos por debajo de las recomendaciones europeas y mundiales, como explican Miguel Guerrero Díaz, psicólogo clínico del Hospital Universitario de Málaga; y Javier Prado, psicólogo clínico y portavoz de la Asociación Nacional de Psicólogos Clínicos y Residentes (ANPIR). “El sistema de salud español no resuelve los problemas de salud mental ya que propicia la toma de medicamentos sin solucionar problemas como la depresión y la ansiedad. Si se convocaran 422 plazas de Psicólogos Internos Residentes (PIR) se mejoraría la atención psicológica, ya que con las 231 plazas actuales no llegamos a las recomendaciones europeas, que son 18 psicólogos públicos por 100.000 habitantes”, explica Prado.

Atendiendo a otros informes como el Mental Headway 2023, España y Bulgaria son los dos países de la Unión Europea con menos profesionales de la salud mental: hay un total de 25 psiquiatras, psicólogos y enfermeros especializados en salud mental por cada 100.000 habitantes. En países como Suecia hay 150 y en Finlandia 200.

Tanto la Organización Mundial de la Salud como distintas sociedades científicas apuntan a que el tratamiento psicológico es uno de los más efectivos para abordar los problemas de salud mental. “Está demostrado que con la terapia psicológica las personas se recuperan tres veces mejor que aquellas que han sido atendidas sólo con psicofármacos”, añade el portavoz de la Asociación Nacional de Psicólogos Clínicos y Residentes (ANPIR).

Desigualdad por comunidades
A pesar de que desde el año 2003 hay un compromiso del Ministerio de Sanidad, que se deriva de la ley de equidad del sistema de salud, “no hay tampoco igualdad entre las diferentes comunidades autónomas” a la hora de contratar psicólogos, explica Javier Prado. “Es un panorama de inequidad, tu código postal determina distintas posibilidades de acceder a tratamiento psicológico. No se garantiza esa igualdad entre distintas autonomías, como se dice en la Constitución”.

Esto sucede incluso dentro de las comunidades autónomas. No es lo mismo que te atiendan en Teruel que en Zaragoza. Los gobiernos no toman medidas para disminuir las desigualdades, añade el presidente de ANPIR.

Por comunidades autónomas las que más psicólogos clínicos tienen en el SNS, según ANPIR, son Cataluña, con 15 psicólogos por 100 mil habitantes y Navarra con 12 por 100.000 habitantes. A la cola se encuentran Andalucía, con 3,2 por 100.000 habitantes y Galicia, con 3,5.

Listas de espera
Según la Asociación Nacional de Psicólogos Clínicos y Residentes, ANPIR, “la media nacional de lista de espera para acceder a un especialista en psicología clínica es de 2-3 meses”. Eso sí, dependiendo del código postal, te atienden antes o después. Así en “Galicia y Madrid las listas de espera para que te den cita es de seis a nueve meses mientras que en Euskadi o Cataluña la tardanza es de dos  o tres meses.

“Un problema grave sobre todo teniendo en cuenta que hay personas que no pueden pagarse un psicólogo privado cuyo precio de media son 60 o 90 euros una sesión de una hora y, en un tratamiento normal, es necesario ser tratado una vez por semana”, añade Javier Pardo de ANPIR.

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