Por Europa Press
16 de diciembre de 2024El Vall d’Hebron Institut d’Oncología (Vhio) ha participado en el ensayo clínico de fase 3, EMBER-3, que ha demostrado que tratar a las pacientes con cáncer de mama avanzado ER+HER2 con el nuevo fármaco oral de última generación Imlunestrant mejora los resultados clínicos de estas mujeres.
El estudio, publicado en ‘‘The New England of Medicine’’, ha evaluado la eficacia de este fármaco, sólo y en combinación con Abemaciclib, demostrando que usar Imlunestrant para tratar a las pacientes con cáncer de mama avanzado ER+HER2, que progresan en terapia endocrina, mejora la supervivencia sin progresión frente a la terapia estándar en pacientes con mutación ESR1, pero no en la población general.
Por otro lado, la combinación de Imlunestrant con Abemaciclib mejoró significativamente la supervivencia sin progresión ‘‘en todas las pacientes, independientemente del estado de mutación ESR1’’.
En el estudio participaron 874 pacientes con cáncer de mama avanzado diferenciadas por haber progresado durante la terapia endocrina adyuvante o en los 12 meses tras su finalización, así comopacientes sometidas a una primera línea de tratamiento en contexto de enfermedad avanzada con un inhibidor de la aromatasa, con o sin un inhibidor de ciclina. Las pacientes recibieron, de forma aleatoria, Imlunestrant en forma de monoterapia, la combinación Imlunestrant-Abemaciclib o la terapia endocrina estándar.
En el subgrupo de pacientes que presentaban la mutación de ESR1, el Imlunestrant en monoterapia aumentó la mediana de supervivencia libre de progresión, es decir, que el tiempo que tarda en volver a crecer el tumor desde el inicio del tratamiento fue 5,5 meses con Imlunestrant, frente a los 3,8 con la terapia estándar.
En el total de pacientes tratadas, el Imlunestrant en monoterapia ‘‘no mostró beneficios significativos’’, mientras que la combinación de los dos medicamentos presentó una mediana de supervivencia libre de progresión de 9,4 meses.
Este nuevo fármaco no está todavía aprobado por las agencias regulatorias para su uso en la práctica clínica. Cristina Saura, coautora del estudio e investigadora