Por Pedro Martínez
9 de diciembre de 2024Un estudio desarrollado por la Universidad de Tianjin (China) y publicado en la revista Nutrition, Metabolism and Cardiovascular Diseases, ha analizado datos del uso de escaleras y salud general de casi medio millón de personas que participan en el proyecto llamado UK Biobank. Las personas estudiadas, inicialmente libres de enfermedades del corazón, estuvieron aportando datos de este tipo durante 12 años para finalmente determinar que subir 110 escalones diarios en adultos, lo cual se traduce en unos 7 pisos aproximadamente, reduce un 31% la posibilidad de padecer un accidente cerebrovascular.
Los accidentes cerebrovasculares se dividen en dos tipos, los hemorrágicos, también conocidos como derrame cerebral, y los isquémicos, conocidos como ictus. El primer tipo tiene lugar cuando, debido a la rotura o el derrame de un vaso sanguíneo, aumenta la presión en las neuronas causando un daño. Por otro lado, un ictus tiene lugar cuando el flujo de sangre hacia una parte del cerebro se reduce o se interrumpe, privando al tejido cerebral de oxígeno y nutrientes. Estas dos afecciones conllevan, entre otras consecuencias, la pérdida de movimiento total o parcial, disminución de la fuerza, alteraciones del tono muscular y dificultades en la coordinación y el equilibrio. Debido al desenlace de estas afecciones, es importante tratar de tener hábitos saludables que reduzcan el riesgo de padecerlas. ‘‘Nuestros hallazgos sugieren que promover la subida regular de escaleras podría ser un objetivo potencial para prevenir la fibrilación auricular’’, aseguran los investigadores.
El estudio explica cómo realizar pequeñas modificaciones en la rutina diaria, como sustituir el ascensor por las escaleras, puede tener un impacto significativo en la salud general y la reducción de riesgos cardiovasculares.