Pacientes tetrapléjicos pueden controlar sus sillas de ruedas con la mente

Aunque parezca ciencia ficción, no lo es. Un nuevo estudio, publicado en la revista “iScience”, muestra como una silla de ruedas con control mental puede ayudar a las personas tetraplejias a recuperar la movilidad traduciendo sus pensamientos en ordenes mecánicas.

Los investigadores de la Universidad de Texas, en Austin, demostraron que, después de entrenarse durante un largo periodo de tiempo, las personas afectadas pueden manejar sus sillas de ruedas con sus pensamientos. "Demostramos que el aprendizaje cerebro-máquina es importante para que los usuarios puedan manejar con éxito estas sillas de ruedas. Nuestra investigación da lugar a una posible vía para mejorar la tecnología de interfaz cerebro-máquina no invasiva", afirma José del R. Millán, uno de los autores del estudio.

En la investigación  participaron tres personas tetrapléjicas, una sin poder realizar ningún movimiento por debajo del cuello y otras dos con la posibilidad de levantar ligeramente los brazos y los dedos. Cada uno de los participantes se sometió a sesiones de entrenamiento tres veces por semana durante cinco meses. Estos llevaban un gorro que detectaba sus actividades cerebrales a través de electroencefalogramas, convirtiendo las señales en órdenes mecánicas para la silla. Se les pidió que controlaran la dirección de la silla de ruedas pensando en mover las partes de su cuerpo. En concreto, debían pensar en mover ambas manos para girar a la izquierda y ambos pies para girar a la derecha.

Los resultados del entrenamiento mostraron cómo dos de los participantes sí presentaron patrones de actividad cerebral y respondieron al dispositivo permitiéndoles realizar una prueba final basada en conducir sus sillas por una sala de hospital desordenada. Tenían que sortear obstáculos como un separador de habitaciones y las camas del hospital, colocados para simular el entorno del mundo real.

Ahora el equipo busca entender por qué uno de los participantes no fue capaz de completar las pruebas. Esperan llevar a cabo un análisis más detallado de las señales cerebrales de todos los participantes para comprender sus diferencias y las posibles intervenciones para las personas que tienen problemas con el proceso de aprendizaje en el futuro.

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