Por Andrea Martín
27 de febrero de 2024Un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia, la Universidad de Valencia, el CIBER de Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina (CIBER-BBN), el CIBER de Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED) y el Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) ha desarrollado una innovadora sonda para detectar células senescentes, comúnmente llamadas “células zombies”, para monitorizar y comprender mejor los procesos relacionados con el envejecimiento y establecer nuevas estrategias para revertir los procesos degenerativos asociados al mismo.
Las células senescentes son aquellas que deberían ser “eliminadas” del organismo, pero, por fallos del propio cuerpo, no realizan las funciones celulares y no se multiplican ni dividen. Según explica el equipo de investigadores, uno de los rasgos distintivos del envejecimiento es el aumento en la frecuencia de células senescentes en la mayoría de los órganos, lo que provoca una disfunción de los tejidos. La presencia de estas células está asociada, además, a numerosas enfermedades relacionadas con la edad. “El objetivo principal de la senescencia celular es evitar la proliferación de células dañadas que puedan producir cáncer. Sin embargo, cuando el daño persiste, o durante el envejecimiento, las células senescentes tienden a acumularse de manera anómala, lo que afecta a las funciones de los tejidos y acelera el envejecimiento. De ahí la importancia de desarrollar nuevos sistemas que permitan detectar estas células de manera simple y eficaz”, destaca Ramón Martínez Máñez, subdirector del Instituto Interuniversitario de Investigación de Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico (IDM) en la UPV y director científico del CIBER-BBN.
Tras su administración en ratones, la sonda interactúa con una enzima que es especialmente abundante en células senescentes para dar lugar a un compuesto fluorescente que es rápidamente eliminado por la orina. “En función de la intensidad de la señal en la orina, podemos saber la carga de células senescentes en el organismo”, destacan Isabel Fariñas de la UV y subdirectora del CIBERNED.
En el estudio, publicado en la revista Nature Communications, también se realizó el seguimiento de un tratamiento senolítico, es decir, un tipo de tratamiento con fármacos que eliminan células senescentes y pueden rejuvenecer tejidos, y se observó que la intensidad de la señal en la orina estaba relacionada con la reducción de senescencia en los animales y la reducción de la ansiedad asociada a la edad.
“Cuando se administra, se libera un fluoróforo que, en última instancia, se excreta por los riñones y puede medirse en la orina. La intensidad del fluoróforo indica el nivel de carga de senescencia celular y hemos visto que éste se correlaciona con la ansiedad asociada a la edad durante el envejecimiento y el tratamiento senolítico”, explica Isabel Fariñas de la UV y subdirectora del CIBERNED.
Los resultados obtenidos abren una vía para entender mejor el envejecimiento y sus efectos en la salud. “Podría ayudarnos a desarrollar formas más efectivas de abordar los problemas relacionados con la edad, así como tratamientos que tengan como fin la eliminación o reducción de la senescencia celular, incluso en humanos”, concluye Ramón Martínez Máñez.