Por Andrea Martín
8 de noviembre de 2022Que el aceite de oliva es bueno para la salud no es algo nuevo. Aparte de ser un alimento muy apreciado dentro de la gastronomía, son innumerables los estudios que abalan sus efectos positivos para salud. Uno de los últimos, publicado en la revista “Clinical Nutrition”, ha demostrado que una mayor ingesta de aceite de oliva reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular, diabetes y mortalidad prematura. La investigación, la mayor revisión sistemática realizada hasta la fecha de la evidencia epidemiológica, ha sido llevada a cabo por investigadores del área de Obesidad y Nutrición del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBEROBN), la Universidad de Navarra, el Instituto de Salud Pública de Navarra, la Universidad Autónoma de Madrid y la Agencia Española de Seguridad Alimentaria. Para llevar a cabo el estudio, los investigadores recogieron los datos de consumo de aceite de oliva en participantes que, durante el seguimiento, desarrollaron alguna enfermedad cardiovascular, diabetes de tipo 2 o sufrieron una muerte prematura. "Este estudio representa la valoración de mayor envergadura realizada hasta la fecha de los efectos del consumo de aceite de oliva sobre la salud”, explica el coordinador de esta revisión, Miguel Ángel Martínez, investigador principal del CIBEROBN y catedrático de Medicina y Salud Pública de la Universidad de Navarra.
Los resultados mostraron el efecto que tiene este alimento en un consumo de 25 gramos más al día. Y encontraron que reduce un 16% el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, un 22% el riesgo de diabetes y un 11% el riesgo de mortalidad.
Beneficios del aceite de oliva en la salud
El aceite de oliva, sin duda, es un producto muy apreciado, no solo por su sabor si no también por los beneficios que aporta a la salud. Según el doctor Pedro Gargantilla, director médico de Medicina Responsable, “los principales beneficios que tiene son, sobre todo, cardiosaludables. Reduce el colesterol malo y aumenta las vitaminas A, D, E y K”. Además, ayuda a prevenir el deterioro mental, mejora la circulación, potencia el sistema inmunológico frente a virus, favorece la digestión, combate el estreñimiento y previene de la aparición de distintos tipos de cáncer, entre otros. Por lo que, un consumo diario y controlado de este producto no solo aportará calidad en las comidas si no también a la salud.
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