Por Virginia Delgado
17 de septiembre de 2024Un grupo de investigadores del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CBM) de Madrid ha revelado una de las causas responsables de las recidivas de los tumores linfáticos, es decir, de la reaparición del tumor cuando parecía que había sido eliminado.
La investigación, publicada en Cell Death & Diseas y financiada por la Fundación de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), ha sido dirigida por el investigador Miguel R. Campanero.
El equipo de científicos ha descubierto que la acumulación de agentes antioxidantes, como el glutatión, provoca una resistencia y supervivencia de las Células Iniciadoras de Tumores (CITs) a las terapias actuales (quimioterapia y radioterapia), generando un nuevo tumor más resistente y agresivo que el inicial. “Estos resultados cuestionan la creencia generalizada de que los antioxidantes son necesariamente beneficiosos para la salud; es posible que ni la carencia ni el exceso de antioxidantes lo sean”, ha señalado Campanero.
A raíz de este hallazgo, los investigadores demostraron que la inactivación de un gen esencial en la producción celular de glutatión (GCLC), así como el uso de un fármaco inhibidor de una de las proteínas esenciales para la síntesis celular de este antioxidante aumentan el grado de oxidación de las CITs e inducen su muerte. “Comprobamos la eficacia del fármaco en un modelo animal en el que se producen de forma espontánea tumores linfáticos agresivos. Descubrimos que inhibe notablemente el crecimiento de los linfomas en las hembras, pero, sorprendentemente, no funciona en los machos”, ha explicado Campanero junto a Alberto Hernández, primer autor del artículo.
Los científicos han concluido que estos descubrimientos podrían dar pie al desarrollo de terapias más eficaces que las que se emplean en la actualidad para los tumores que afectan al sistema linfático. “Los resultados de nuestro estudio sugieren que, para evitar la recidiva de los tumores linfáticos y disminuir los efectos secundarios de los tratamientos antitumorales convencionales, podríamos diseñar una terapia que combine el fármaco inhibidor de la producción de glutatión, que eliminaría las CITs, con dosis más bajas de lo habitual de las terapias convencionales, que destruirían el resto de células tumorales. Estamos intentando conseguir financiación adicional para llevar a cabo este estudio”, ha subrayado Campanero.