Por Aurora Molina
27 de marzo de 2024La resistencia microbacteriana a los antibióticos supone un serio problema en la salud pública. Tan solo en Europa ocasiona más de 35.000 muertes al año, mientras que a nivel mundial las cifras superan el millón de muertes. Este hecho dificulta cada vez más combatir infecciones que en su momento eran más sencillas de tratar. Entre ellas se encuentran las infecciones microbacterianas no tuberculosas, conocidas por ser resistentes a los medicamentos convencionales y por afectar a quienes sufren enfermedades pulmonares complejas.
Investigadores del Instituto de Materiales Inteligentes Funcionales (I-FIM, por sus siglas en inglés), de la Universidad Nacional de Singapur (NUS) han creado un compuesto basado en oligoelectrolitos, una clase de antimicrobianos que pueden diseñarse para formar agentes terapéuticos con el fin de combatir infecciones. “Los oligoelectrolitos representan un enfoque fundamentalmente diferente para el diseño de antibióticos. Su estructura única, que facilita la interacción espontanea con las bicapas lipídicas, permite romper las defensas bacterianas que tan a menudo frustran a los fármacos existentes”, explica Guillermo Bazán, profesor e investigador principal del I-FIM y del departamento de Farmacología de NUS.
Este nuevo agente, denominado COE-PNH2, no solo demuestra una alta eficacia contra “mycobacterium abscessus”, una de las especies de micobacterias más prevalentes, sino que también muestra una combinación de potencia y seguridad que podría remodelar el paradigma de tratamiento para las infecciones pulmonares persistentes. En concreto, según afirman los investigadores, COE-PNH2 ataca a la microbacteria ofreciendo una erradicación más completa, sin permitir que resista y al mismo tiempo, reduce la probabilidad de recaída de la enfermedad.
"La resistencia a las bacterias es, a menudo, el talón de Aquiles de los nuevos antibióticos", afirmó el profesor Bazán. "COE-PNH2 mostró una baja frecuencia de resistencia en nuestro estudio, lo que sugiere que puede seguir siendo eficaz durante más tiempo que los tratamientos existentes, proporcionando a los pacientes una solución más duradera".
Teniendo en cuenta que este descubrimiento es reciente, los investigadores aseguran que aún falta comprender “el mecanismo de acción del fármaco con mayor detalle”.
De hecho, para que pueda incluirse en la práctica clínica, es crucial descubrir la interacción molecular entre el fármaco (COE-PNH2) y las membranas celulares de mamíferos y bacterias. Además, es necesario analizar los mecanismos a través de los cuales funciona el compuesto.
Aun así, este avance supone un paso significativo hacia el abordaje de enfermedades microbianas a través del potencial terapéutico de los oligoelectrolitos.