Desarrollan un algoritmo que permite a los padres identificar el motivo por el que llora su bebé

Una investigación llevada a cabo por el Servicio de Neonatología del hospital Clínic Barcelona y el Instituto de investigaciones biomédicas August Pi y Sunyer ha permitido sentar las bases para conocer por qué llora un bebé. Gracias a los resultados de este estudio, el equipo investigador, junto con la start-up Zoundream AG, ha desarrollado un algoritmo que identifica los distintos tipos de llanto para ayudar a los progenitores. 

El objetivo de esta herramienta es “empoderar a las familias” y ayudarlas, especialmente, “en esas primeras semanas en casa en las que el llanto puede generar mucho estrés” de una forma objetiva y fiable, señala la pediatra e investigadora del estudio Anna Lucia Paltrinieri. “No buscamos ser un reemplazo de los padres, que son los que más saben sobre su hijo, si no ayudarlos”, matiza la doctora. 

Para la elaboración del estudio se analizó el llanto de 38 recién nacidos basándose en parámetros como la acústica, las señales de actividad cerebral, la saturación de oxígeno en el cerebro, las expresiones faciales o los movimientos corporales. Un estudio multimodal que pretende desentrañar el complejo proceso comunicativo de los bebés “para resaltar el potencial clínico del análisis del llanto como una herramienta objetiva y accesible para mejorar la relación entre padres e hijos y para garantizar el bienestar de la familia y el desarrollo del recién nacido”, destacan desde el Clínic. De esta forma han podido clasificar cada tipo de llanto y atribuirle unas características determinadas de forma que puedan ser identificados por el sonido. “Hemos utilizado un algoritmo que nos intentara decir qué le está pasando al bebé solo a través de la acústica”, explica la cofundadora de Zoundream AG, Ana Laguna Pradas, quien destaca que el software ya se está integrando en los principales aparatos de vigilancia de bebés del mercado.

Los resultados del estudio apuntan a un 92% de precisión entre los niños participantes, según destaca Laguna Pradas. Los investigadores pretenden profundizar en el estudio para determinar si estos hallazgos podrían ayudar a predecir riesgos neurológicos de los recién nacidos, usando el llanto como biomarcador de alguna patología.

Tipología de llantos

Cada tipo de llanto se caracteriza por diferentes patrones acústicos, neurofisiológicos y de comportamiento. Por ejemplo, el llanto por hambre es constante, rítmico, de corta duración, intenso y ruidoso y puede provocar una variedad de expresiones faciales y movimientos corporales destinados a llamar la atención del cuidador. En cambio, el llanto de angustia tiene pocas pausas, es errático y más agudo. Mientras que el llanto por gases es parecido a este último, pero más ronco, debido a la tensión que se ejerce sobre las cuerdas vocales.

El llanto por sueño es de larga duración, con gritos prolongados y monótonos que presentan una clara melodía decadente, mientras que el llanto por demanda de atención es muy parecido, aunque parezca más un lamento que un llanto real y su interpretación depende mucho del contexto en el que se presente.

 

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