Por Pedro Martínez
5 de mayo de 2025Un estudio de la Universidad de Virginia Commonwealth de Estados Unidos y del King´s College de Londres ha demostrado que la semaglutida, principio activo de los medicamentos para el control de la diabetes y la obesidad como Ozempic y Wegovy, puede frenar y revertir las consecuencias sobre el hígado de la enfermedad esteatohepatitis asociada a disfunción metabólica (MASH).
MASH es una variante grave de la enfermedad del hígado graso no alcohólica (EHNA) en la que, a causa de un exceso de grasa acumulada en el hígado se genera una inflamación asociada a un importante daño hepático. Esta enfermedad puede evolucionar hasta convertirse en cirrosis y, en los casos más extremos, favorecer la aparición del cáncer de hígado. Solo en Estados Unidos, esta enfermedad afecta a casi 15 millones de personas, lo que supone el 5,8% de los adultos del país.
Pero, los resultados del estudio apuntan a que la semaglutida podría convertirse en la primera y más eficaz opción para el tratamiento de esta enfermedad íntimamente relacionada con ciertos problemas metabólicos, así como con la diabetes tipo 2.
Para probar la eficacia de la semaglutida a la hora de tratar esta enfermedad los investigadores realizaron un ensayo clínico en el que participaron 800 personas de 37 países diferentes, unos pacientes que, además, contaban con un diagnóstico de diabetes tipo 2 u obesidad.
Esta muestra poblacional comenzó a ser suministrada, de manera semanal, con una inyección de este medicamento o con placebo durante un periodo de 72 semanas. Una vez terminado este plazo los resultados indicaban que el 63% de los pacientes que habían recibido tratamiento con semaglutida experimentaban una reducción de la inflamación del hígado sin fibrosis. Por su parte, un 37% mostró una importante mejoría sobre su salud cardiovascular, así como sobre las cicatrices hepáticas.
Además, los efectos secundarios registrados durante el ensayo no fueron más allá de las náuseas, leves problemas digestivos permitiendo que más del 90% de los pacientes pudiera terminar el ensayo sin complicaciones.
Actualmente, Novo Nordisk, propietaria de Ozempic, está tratando de regularizar este nuevo uso de su medicamento. Para ello han planeado una continuación del estudio en el que participarán más de 1.000 personas durante un periodo de cinco años con el objetivo de demostrar los efectos de este medicamento a largo plazo.