Estas son las claves para el cuidado del acné

El acné es un problema muy frecuente, sobre todo entre la población adolescente. Tanto es así que ocho de cada 10 jóvenes lo sufren en algún momento de su vida. Por este motivo, el Consejo General de Enfermería, en colaboración con CeraVe y en el marco de la campaña “En la Piel de la Enfermera”, ha recogido las pautas a seguir en cuanto a la higiene e hidratación de las pieles que presentan esta afección cutánea. Además, inciden en la importancia de la elección de productos para la correcta hidratación de la piel y dan algunas recomendaciones relativas a la alimentación o al ejercicio físico.

Las localizaciones más frecuentes en las que se encuentra el acné son la cara, el tronco y la espalda. Por ello, en cuanto a la higiene, resaltan que se debe limpiar la zona con agua y limpiadores syndet, exentos de jabón, por la mañana y por la noche, evitar la fricción intensa y desmaquillarse al final del día. Con respecto al afeitado, recalcan ablandar la barba con agua tibia y jabón, utilizar maquinilla o cuchilla, pero con suavidad, y afeitarse solo cuando sea necesario, no a diario. Además, indican que, en ningún caso, se deben manipular las lesiones y que la limpieza facial o el peeling sólo se debe hacer si no hay una inflamación de por medio.

Si ponemos el foco en la hidratación, recomiendan usar productos específicos, fórmulas fluidas, con textura de tacto no graso, no comedogénicos, saneantes y matificantes, que producen un efecto inmediato. A ello, añaden el uso de protectores de la barrera cutánea, como las ceramidas o la manteca de karité, de calmantes y seborreguladores.

También hacen hincapié en la importancia de la fotoprotección diaria, ya que algunos medicamentos para el acné son fotosensibles. De hecho, inciden en que tomar el sol con moderación puede mejorar las lesiones, pero un exceso puede ser perjudicial.

Finalmente, recalcan que las personas con acné deben seguir una dieta equilibrada, evitar ciertos alimentos que influyan negativamente sobre su piel, realizar ejercicio físico y acudir al médico para tener un seguimiento óptimo de la afección.

 

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