Por Medicina Responsable
27 de junio de 2025Tras las palabras del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, en las que expresaba su “frustración” por los resultados de la gestión sanitaria en su comunidad que no le dejaban “del todo satisfecho”, el consejero de Sanidad de Castilla y León, Alejandro Vázquez, ha afirmado que, en caso de oír esas palabras de su presidente, pondría su cargo a disposición.
“Si mi presidente dice en público que está frustrado por el resultado de la sanidad y entiendo que el responsable de la sanidad soy yo, no tengo más que poner el cargo a su disposición”, ha expresado el consejero en una entrevista con el presidente de Medicina Responsable, Ernesto Sáenz de Buruaga, en el marco del desayuno informativo “El primer café”.
El consejero ha reaccionado así a las declaraciones del presidente andaluz, de su mismo partido (PP), defendiendo la mejoría en la sanidad andaluza respecto a cuando llegó el gobierno de Moreno al poder, cuando la situación “era muy mala”. A su juicio, antes de que Moreno cesara a su consejera de Sanidad, Rocío Hernández, “sería más fácil que dimitiera”.
Por otro lado, ante las últimas informaciones sobre los presuntos casos de corrupción que rodean al Gobierno, Vázquez ha expresado su incredulidad, vaticinando que la “resistencia” del Ejecutivo “va a durar poco” a tenor de estos casos. Al hilo, ha expresado que “hay que plantearse qué tipo de país tenemos”, comparando esta situación con el país vecino, Portugal, donde “ante la primera insinuación de corrupción”, el presidente socialista presentó su dimisión y convocó elecciones.
Vázquez también ha expresado su discrepancia con la sentencia del Tribunal Constitucional que avala la Ley de Amnistía, por considerar que hace “una interpretación muy peligrosa de la Constitución”. En base a estas circunstancias, ha afirmado que “creo que hoy en día resulta difícil votar al PSOE”.
El responsable de la sanidad castellanoleonesa también ha lamentado que la sanidad se haya convertido en un “campo de batalla político” y un “arma arrojadiza”. “En este país hace unos años era posible hablar de pactos por la sanidad, ahora es imposible”, ha señalado a este respecto.
Vázquez también ha cargado contra la “tendencia” de la ministra de Sanidad, Mónica García, de “saltarse a la torera los órganos de gobernanza” en el Consejo Interterritorial y los “ninguneos” que asegura haber sufrido. Además, ha criticado la falta de información a las comunidades sobre la negociación del Estatuto Marco, algo que considera “extremadamente grave”. “Se van a tomar decisiones que nos afectan directamente a las comunidades, que somos las que gestionamos los servicios de salud, y no hemos podido decir nada”, ha señalado.
El titular de la Consejería ha repasado el trabajo de su departamento en distintos ámbitos sanitarios, como los avances para unificar las historias clínicas de atención primaria y hospitalaria o la reducción de las listas de espera. Así, ha apuntado que, según el último barómetro sanitario, su comunidad es la segunda de España a nivel de satisfacción con el sistema sanitario y que, según la OCU, también se encuentran entre las que “menos se tarda en ver a un médico de familia”.
No obstante, también ha acusado la falta de recursos económicos, aludiendo al modelo de financiación autonómico que considera que “está hecho para financiar a otras comunidades” y castiga a su comunidad. “Estamos hipotecando otros servicios para financiar la sanidad”, ha lamentado a este respecto. El consejero ha aludido al informe del Consejo de Cuentas de su comunidad, que estimó en 500 millones el déficit anual en los últimos diez años.
Vázquez ha apuntado a la dispersión geográfica y a la cronicidad como los dos grandes retos particulares a los que debe hacer frente la administración sanitaria en la comunidad, señalando las dificultades que supone para la red de atención sanitaria. “El 17% de nuestros habitantes son enfermos crónicos complejos o muy complejos, pero de gravedad baja hay más un millón. Solo tenemos 308.000 pacientes sin enfermedades crónicas”. Frente a estas realidades, el consejero se ha mostrado más partidario de “hacer funcionar muy bien lo que tenemos” más que de los grandes cambios.
A las puertas del verano, con las dificultades de cada año para planificar los relevos vacacionales, ha reconocido que la situación es difícil por la falta de médicos. Frente a ello, ha indicado que pondrán en marcha un nuevo “plan de fidelización” para los médicos que terminen la especialidad. El consejero también ha reconocido que los salarios de los médicos deberían ser más altos, pero apuntando al mismo tiempo que “deben ser conscientes del país en el que vivimos y cómo cobran las demás profesiones”.
“El sistema no mide la vocación y tenemos un buen ejemplo en lo que sucede con la elección del MIR. Ahora hay dos especialidades que eligen los MIR dermatología y cirugía plástica. Eso da una idea de cómo está el nivel de vocación”.