Por Medicina Responsable
1 de agosto de 2025Investigadores del Hospital 12 de Octubre de la Comunidad de Madrid y el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) han puesto en marcha una iniciativa para impulsar un diagnóstico y abordaje menos invasivo del cáncer de vejiga. Se trata de la creación de una startup, denominada Danae Urogenomics, que busca impulsar el sistema de análisis molecular BlaDimiR, un método que requiere únicamente de una muestra de orina para detectar la enfermedad y predecir la evolución del tratamiento. Esta empresa biotecnológica, buscará ahorrar pruebas dolorosas y abrir la puerta a tratamientos más personalizados, evitando terapias innecesarias y mejorando los resultados clínicos.
La doctora Marta Dueñas, de la Unidad de Biología Molecular del CIEMAT y líder de este proyecto, explica que “BlaDimiR es fruto de una investigación pública consolidada, pero su implantación real en la práctica clínica requiere capacidades y estructuras que van más allá del ámbito académico o investigador”. Por ello, resalta que la creación de Danae Urogenomics es “el vehículo necesario para convertir una innovación biomédica en una herramienta clínica usable, certificada y sostenible, asegurando que su impacto trascienda el laboratorio y llegue de forma efectiva a los pacientes”.
La misión de esta compañía será actuar como puente entre la investigación biomédica y la práctica clínica, desarrollando para ello estas herramientas diagnósticas basadas en biomarcadores moleculares para que puedan ser integradas fácilmente en el circuito asistencial hospitalaria,
A través de convenios con hospitales y laboratorios clínicos, BlaDimiR será utilizado como prueba diagnóstica y de seguimiento y para el tratamiento de pacientes que cumplan criterios clínicos de inclusión. El objetivo, resume la doctora Dueñas, es “incrementar el número de los que puedan acceder a un seguimiento más personalizado y eficiente de su enfermedad”.
El sistema BlaDimiR (Bladder Diagnostic MicroRNA) está basado en la identificación de pequeñas moléculas que hay en la orina, producidas por las células tumorales, que permiten hacer un diagnóstico totalmente no invasivo. El método se basa en la técnica de biopsia líquida que identifica moléculas de ARN de pequeño tamaño en muestras de fluidos del cuerpo.
Este sistema permite una detección más precisa, menos invasiva y más personalizada que los métodos convencionales, reduciendo la necesidad de pruebas agresivas como la cistoscopia. Este sistema no solo hace posible una detección más temprana y precisa del cáncer de vejiga, sino que también predice qué pacientes responderán a la inmunoterapia con BCG (Bacilo de Calmette-Guérin) que es el tratamiento estándar para formas no músculo-invasivas de la enfermedad.