Por Andrea Rivero
16 de noviembre de 2022Investigadores del área de Cáncer del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBERONC) y del Instituto de investigación Sanitaria de Santiago de Compostela han identificado un nuevo biomarcador en sangre que permite detectar el cáncer colorrectal en sus etapas iniciales, antes de que los pacientes presenten síntomas.
Dos millones de personas en el mundo padecen cáncer colorrectal y se estima que a lo largo de 2022 en España se diagnosticarán cerca de 40.000 nuevos casos, por lo que la detección temprana es indispensable para lograr una mejor atención y tratamiento al paciente.
Este cáncer se diagnostica, en la mayoría de los casos, en etapas avanzadas, lo cual representa una de las principales causas de mortalidad por este tumor. La investigación del CIBERONC permitirá hacer un cribado no invasivo del cáncer colorrectal en las personas que todavía no presentan síntomas y, además, han demostrado su utilidad para evaluar la eficacia del tratamiento en pacientes que presentan la enfermedad en estado avanzado.
El nuevo biomarcador
De acuerdo con el doctor Ángel Díaz-Lagares, investigador del CIBERONC y uno de los coordinadores del estudio, “las marcas epigenéticas controlan el funcionamiento de nuestros genes actuando como ‘interruptores’ capaces de controlar cuáles de ellos tienen que estar ‘encendidos’ y cuáles deben de estar ‘apagados’. Estas marcas pueden estar alteradas en las etapas más iniciales del cáncer, convirtiéndolas en biomarcadores ideales para la detección precoz de esta enfermedad. Se trata de alteraciones epigenéticas que se producen en las células del cáncer y pueden ser detectadas en la sangre mediante biopsia líquida”.
En este caso, el biomarcador se basa en el análisis de la metilación del gen LINC00473, “que se localiza en una zona de nuestro ADN que hasta hace poco se conocía con el nombre de ‘ADN basura’, ya que se creía erróneamente que no tenía ninguna función”, añade el doctor Díaz-Lagares.
La biopsia líquida para la detección temprana del cáncer colorrectal
Más allá de la colonoscopia o de la inmunoquímica fecal, las pruebas más usadas para el diagnóstico de este tumor, los avances en este campo han abierto la puerta a la biopsia líquida. Se trata de una prueba que se realiza a través de una muestra de sangre con el fin de buscar células cancerosas o fragmentos de ADN de las células tumorales que circulan por la sangre.
En la investigación se analizaron los datos de un total de 645 pacientes y 233 individuos sanos y confirmaron que LINC00473 “es un nuevo biomarcador detectable por biopsia líquida con una alta precisión diagnostica, incluso en las etapas iniciales del cáncer, cuando aparecen pólipos avanzados que son la antesala del cáncer colorrectal”, explica el doctor Rafael López, investigador principal del CIBERONC.
Ambos investigadores coinciden en que este descubrimiento supone un importante avance para el diagnóstico precoz y la medicina de precisión en pacientes con cáncer colorrectal.
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