Por Medicina Responsable
25 de junio de 2025Por primera vez, las mujeres de España fallecen más de cáncer de pulmón que de cáncer de mama, según los datos provisionales de mortalidad absoluta publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2024. En ese año, España registró 23.239 muertes por cáncer de bronquios y pulmón, perteneciendo 6.679 a mujeres, lo que representa un incremento del 7% en la mortalidad femenina por esta patología.
En este contexto, el Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), formado por más de 700 especialistas, advierte de que esta nueva situación debe frenarse a través de la implementación de medidas, tanto políticas como educativas, enfocadas en la prevención del tabaquismo femenino.
“Lo que ha sucedido es el sorpasso que los especialistas llevaban años anunciando y que no se ha podido detener”, explica el doctor Alberto Ruano, responsable de epidemiología del GECP y catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Santiago de Compostela.
Según los datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), se estima que en 2025 serán diagnosticadas en España 129.590 mujeres con cáncer de pulmón, destacándose el incremento progresivo de las muertes por esta patología.
El GECP considera que los últimos datos del INE son “un punto de inflexión alarmante” que impacta directamente en la salud femenina. “Llevamos años reclamando con urgencia la implementación de políticas efectivas, como campañas educativas focalizadas en la prevención del tabaquismo femenino, dirigidas tanto a adolescentes como a mujeres adultas”, asegura el doctor Ruano. También aboga por reforzar las herramientas de cesación tabáquica, garantizando el acceso gratuito o asequible a ayudas farmacológicas, apoyos psicológicos y seguimiento supervisado por los profesionales.
Por su parte, el doctor Mariano Provencio, presidente del GECP y jefe de Oncología del Hospital Puerta de Hierro de Madrid, realiza un contundente alegato: “Queremos lanzar un firme llamamiento a la acción urgente y coordinada entre las administraciones sanitarias, las organizaciones profesionales y la sociedad civil. El cáncer de pulmón representa una emergencia de salud pública que exige priorizar la lucha contra el tabaquismo, mejorar el seguimiento de la patología y apoyar la investigación”, asegura.
Para Provencio, además, en el caso de los tumores de pulmón en la mujer es necesaria una “investigación intensificada en mecanismos biológicos, diagnósticos y terapias específicas del impacto de esta neoplasia entre el sexo femenino”.
Aunque los efectos del tabaco impactan de manera similar en hombres y mujeres, las enfermedades asociadas a su consumo han presentado a lo largo de la historia grandes diferencias. Tradicionalmente, el tabaquismo se ha relacionado con el ámbito masculino, ya que estaba mal visto que las mujeres fumasen. Sin embargo, a partir de los años 40 su compra comenzó a aumentar entre los sectores femeninos de la sociedad al tener que ocupar ellas el trabajo de ellos durante la Segunda Guerra Mundial.
En los años 80, la industria tabaquera asoció el consumo femenino con la búsqueda de libertad e independencia, y, desde entonces, el tabaquismo entre las mujeres se ha mantenido constante con pequeñas variaciones ascendentes. De hecho, en la actualidad está cayendo la compra entre los varones españoles, aunque la de las mujeres permanece estable. Otro dato relevante es que en la mayoría de los países de Europa occidental se observan dos tendencias: las adolescentes fuman en mayor proporción y las mujeres cercanas a los 40 años tienden a dejar el tabaco en menor medida que los varones de su misma edad.
Además, el tabaquismo en mujeres está relacionado con patologías específicas según el sexo, como pueden ser los problemas en la menstruación, ya que la regla es más irregular en las fumadoras y la menopausia se adelanta 2 o 3 años. También puede acarrear problemas en la producción, ya que estas tienen tres veces más probabilidades de tardar un año en quedarse embarazadas y existe mayor riesgo de embarazo ectópico o aborto.