Por Julia Porras
21 de septiembre de 2022La enfermedad de alzhéimer es la forma más frecuente de demencia, supone el 60% de los casos, así como la principal causa de deterioro cognitivo en el mundo. En nuestro país sufren esta enfermedad neurodegenerativa unas 800 mil personas y unos 40.000 nuevos casos son diagnosticados cada año.
De estos casos, más del 90% corresponden a personas mayores de 65 años, dándose en una de cada tres personas de esta franja de edad. Además, la probabilidad de desarrollar la enfermedad aumenta de forma exponencial a medida que envejecemos, y es por esta razón que la cifra aumenta a entre 14 a 30 casos por cada 1.000 habitantes. Así, el progresivo envejecimiento de la población de nuestro país hará que en el año 2050 el número de pacientes ascienda casi a dos millones de personas.
“El alzhéimer es una enfermedad que se caracteriza por producir de manera gradual y progresiva la pérdida y muerte de las neuronas, lo que conduce al deterioro de las funciones cognitivas, alterando la capacidad funcional y produciendo una gran discapacidad y dependencia de los pacientes”, explica el doctor Juan Fortea, coordinador del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
La enfermedad sigue un patrón más o menos predecible, pero evoluciona de forma diferente en cada persona y depende mucho de la edad en la que se manifiesta, de la genética del paciente, de sus hábitos de vida y de su historia clínica.
Se desconoce la causa exacta de la enfermedad y los últimos avances pasan por la necesidad de una detección precoz para prevenirla. Lo que sí sabe es que es una enfermedad de origen multifactorial en el que parece que están implicados diferentes procesos, como la acumulación de ciertas proteínas cerebrales, la neuro inflamación, cambios vasculares y algunos factores genéticos, que predisponen a ciertas personas a que la desarrollen.
Envejecer no es sinónimo de alzhéimer
A pesar de que la edad es el principal factor de riesgo para desarrollar alzhéimer, los expertos aseguran que “esta enfermedad y sus síntomas no forman parte del envejecimiento normal del cerebro”. Se tiende a pensar que una persona pierde con los años memoria y capacidades cognitivas, pero “esto es una idea errónea que solo ayuda a que la enfermedad de Alzhéimer esté infradiagnosticada”, señala el doctor Fortea. De hecho, desde la SEN se estima que el 50% de los casos que aún son leves, están sin diagnosticar.
Es importante, por tanto, identificar y diagnosticar de forma precoz a los pacientes de alzhéimer, porque esto posibilita iniciar terapias farmacológicas y no farmacológicas destinadas a mejorar los síntomas y a aumentar la calidad de vida de los pacientes unos años.
Avances contra el alzhéimer
El Alzheimer es una enfermedad sin cura de momento. Por eso cada avance es importante. Sin embargo, los adelantos en el tratamiento de esta enfermedad son lentos, de hecho, desde 2003 no se ha aprobado en España ningún nuevo fármaco que permita la mejoría sintomática de la enfermedad. Aun así, desde la SEN se muestran esperanzados ya que a finales de 2022 y 2023 se conocerán los resultados de dos nuevos tratamientos, basados en el uso de anticuerpos monoclonales, que puede que permitan modificar los procesos fisiopatológicos claves de la enfermedad. “En este sentido se han identificado varios factores de riesgo modificables que permitirían prevenir al menos un 30% de los casos de demencia en el mundo”, asegura el doctor Fortea.
A pesar de estos posibles avances, desde CEAFA, Confederación Española de Asociaciones de alzhéimer, que agrupa a todas las asociaciones de alzhéimer de nuestro país, reclaman más investigación “para actuar de manera concreta y específica a lo largo de toda la enfermedad”. Además, piden generar más conciencia en la sociedad sobre esta enfermedad y dar más voz a los pacientes.
Qué podemos hacer para prevenirla
Mantenerse intelectualmente activos, fomentar un buen estado de ánimo, conservar el contacto personal con amigos y familiares, abandonar el consumo del alcohol y el tabaco, realizar ejercicio físico y tener peso saludable mediante una dieta adecuada, controlar la diabetes y la hipertensión arterial, corregir la pérdida de audición o evitar los traumatismos cerebrales. Esta son algunas de las medidas protectoras que pueden retrasar y llegar a evitar la aparición de la enfermedad.
Y es que esta enfermedad tiene un impacto sociosanitario muy alto, ya que se estima que los costes directos por paciente rondan los 40.000 euros, además del impacto emocional que supone en una familia el tener que cuidar a un enfermo de alzhéimer que se va deteriorando poco a poco. Olvidando hasta quién es.
Neuraxpharm lanza un estudio clave para la prevención
El estudio Neuraxcare, llevado a cabo por la farmacéutica Neuraxpharm, ha presentado los resultados del estudio “Neuraxcare, detección precoz del deterioro cognitivo en personas mayores en la farmacia comunitaria”, una iniciativa pionera en España para valorar la prevalencia del deterioro cognitivo leve en personas a partir de los 70 años, que trata de poner en valor el papel del farmacéutico en la detección precoz de esta enfermedad.
Los datos obtenidos por Neuraxcare indican que un 38,5% de las personas mayores muestran riesgo de deterioro cognitivo y un 42,9% aducían pérdida de memoria. En el estudio se ha utilizado el cuestionario IQ-CODE como herramienta para detectar precozmente posibles signos de la enfermedad. A mayor edad se detectó mayor proporción de riesgo de deterioro cognitivo, siendo la franja de edad de 85 años la que presentaba mayor riesgo. Otros factores, además de la edad, fueron haber padecido un ictus en los últimos dos años, ser fumador o la diabetes. El estudio se ha llevado a cabo con la implicación de 197 farmacéuticos y 910 cuidadores.
El rol de los farmacéuticos comunitarios en la detección precoz de esta enfermedad es clave debido a la cercanía de estos profesionales sanitarios a las personas mayores y sus cuidadores.