44 personas sufren una intoxicación alimentaria en el programa “MasterChef”

Con solo dos semanas de emisión, el reconocido programa de “MasterChef” se ha visto envuelto en una polémica durante su undécima temporada. Tras una prueba que se realizó en el Oceanográfic de Valencia, una trabajadora del acuario publicó en su cuenta de Twitter que habían sufrido una intoxicación masiva tras consumir la comida realizada por el programa. “Todas las de la mesa acabamos con gastroenteritis. Tuve que ir a urgencias a que me inyectasen Primperan para poder dejar de vomitar. Perdí cinco kilos en tres días. Gracias MasterChef por la peor experiencia gastronómica que he tenido en mi vida”.

El caso de esta usuaria no ha sido aislado. Según la Conselleria de Sanidad de Valencia, un total de 44 personas que participaron como comensales sufrieron la intoxicación. La joven añadió que Sanidad Pública tenía constancia de lo sucedido y les llamó para investigar, pero “la cosa no llegó a nada”.

Shine Iberia, la productora del programa, ha emitido un comunicado reconociendo lo ocurrido, pero señalando que este hecho ha sido un accidente insólito en los 11 años del programa. “Desde MasterChef lamentamos mucho la indisposición que manifestaron algunos de los comensales que asistieron a la grabación de nuestro exterior en Valencia, con quienes se estuvo en contacto en todo momento a través del Oceanogràfic, al tratarse de personal de la compañía. Se trata de un caso absolutamente excepcional en estos 11 de años de MasterChef en España, un programa donde es una prioridad absoluta garantizar el cuidado alimentario de las personas que intervienen”. Asimismo, añaden que se han tomado las medidas oportunas, “los alimentos fueron analizados en origen con resultados positivos y se garantizó su trazabilidad en todo el proceso.

El menú de la desgracia

Un total de 120 personas participaron en la cata de esta experiencia gastronómica. La prueba del programa se centró, para conmemorar el 20º aniversario del acuario, en el menú del chef Rakel Cernicharo, que rendía tributo al mundo marino. El menú, compuesto principalmente de marisco fusionado con comida india, contó con un primer plato de una moluscada valenciana formada por ostras, almejas y pesto a base de algas; un segundo plato con un suquet thai de lubina, plato típico de las costas de levante; y tarta de queso japonesa con algas de postre. De hecho, Cernicharo advirtió varias veces de que los platos tenían bastantes fallos de elaboración, pero nadie sospechó que estos pudieran encontrarse en mal estado. 

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