Por Andrea Rivero
4 de agosto de 2022La Covid-19 apareció y se expandió con una rapidez insólita, llegando a paralizar todo el mundo. Se trataba de un virus poco conocido del que no se sabía casi nada, hasta que se descubrieron los tratamientos y vacunas que lo previenen. Ahora, en línea con los estudios sobre el SARS-CoV-2, un grupo internacional de investigadores de 25 países, incluidos investigadores del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), han descubierto 11 nuevas regiones genéticas que están implicadas en la susceptibilidad a la infección y en la gravedad clínica de la Covid-19.
Entre los genes hallados se encuentran ciertos genes codificantes de surfactantes pulmonares, que tienen un papel clave en la función pulmonar ya que ayudan a evitar el colapso alveolar y, por tanto, las dificultades respiratorias. Además, también tienen una función protectora frente a las bacterias y virus patógenos que entran en el organismo a través del aire aspirado.
Esta investigación congrega los resultados de 60 estudios en los que se han reunido datos de personas que requirieron asistencia respiratoria o que fallecieron como consecuencia de la enfermedad (9.376 casos), personas con Covid moderado o grave (25.027 casos y 2.836.272 individuos de control) y casos con infección por SARS-CoV-2 independientemente de la sintomatología (125.584 casos y 2.575.347 individuos de control).
De acuerdo con Israel Fernández Cadenas, investigador del Instituto de Investigación del Hospital de Sant Pau y participante en la investigación, “en este nuevo trabajo ampliamos el mapa que empezamos el año pasado y casi duplicamos el número de regiones y cromosomas estudiados, pasando de 13 a 23. Además, se han incluido muestras de todo el mundo mejorando el conocimiento que tenemos de los procesos biológicos que causan los síntomas severos de covid-19”.
La identificación de estos determinantes genéticos es esencial para conocer los mecanismos biológicos que subyacen a la enfermedad, para encontrar tratamientos que sean eficaces y para proteger a las personas potencialmente más vulnerables.