Por Gema Puerto
2 de enero de 2023Pendientes de China otro año más después de ver como sus ancianos permanecen hacinados en los hospitales por la Covid. 2023 inicia su andadura con una situación muy diferente a la que teníamos hace un año con la primera oleada de ómicron, pero con altas dosis de preocupación por la explosión de contagios en China y la deriva de una nueva variante sobre el mundo.
Como explican los expertos, para tener una imagen real de lo que está sucediendo en el país asiático hay que esperar a febrero que es cuando las olas de virus respiratorios dan la cara y se verá realmente el alcance de lo que sucede en nuestro país. Mientras esto ocurre, los contagios en China por Covid están llegando a su pico más alto según un estudio dirigido por expertos del Centro de Sanidad Pública de Shanghái, que ha sido publicado en la revista Frontiers of Medicine, dependiente del Ministerio de Educación de China.
Los investigadores han concluido que las zonas rurales y las afueras de las ciudades experimentarán la ola de contagios más tarde y advierten de "un pico de infecciones significativo" que en 2023 caerá entre el 21 y el 27 de enero. Según este estudio muchos trabajadores inmigrantes en las ciudades vuelven a sus lugares de origen para pasar las fiestas con sus familiares, lo que causará que "la propagación de la epidemia se acelere".
China es una superpoblación de 1.400.000.000 habitantes. Un estudio británico calcula que hay hasta 9.000 muertes diarias. Los hospitales están saturados y el escaso avance de las vacunas han provocado que la enfermedad se vuelva a disparar. Tan solo en los últimos tres meses, China ha detectado más de 130 casos derivados de la variante ómicron. Los principales son estos dos: BA-5-2 y BF-7. Esta última es la que tiene una tasa de contagio más alta. El país contabiliza un muerto diario, aunque el estudio británico plantea una situación alarmante.
Mientras los casos por Covid se incrementan día a día en China, la Organización Mundial de la Salud urge al país chino a compartir sus datos en tiempo real y ha solicitado más datos sobre secuenciación genética, datos por el impacto de la enfermedad, hospitalizaciones, admisiones y muertes.
En España los primeros controles anticovid que se han realizado este fin de semana pasado a todos los pasajeros provenientes de China en los aeropuertos han sido negativos.
En España ya se han planteado medidas de control de fronteras (test y certificados de vacunación con vacunas autorizadas por la OMS para pasajeros provenientes de China), vigilancia activa y secuenciación de muestras para analizar la aparición de variantes, y estímulo a la vacunación COVID en la población española (particularmente en los grupos etarios donde se ha objetivado un cierto retraso en la revacunación).
El Consejo General de Médicos considera que en el contexto actual la entrada de ciudadanos provenientes de China debe de contar con la doble condición de prueba PCR negativa, así como el certificado de vacunación COVID.
La coordinación entre autoridades sanitarias central y autonómicas es esencial, debiendo evitarse que esta situación sea motivo para una nueva controversia política: el SNS tiene un marco institucional y organizativo para tomas decisiones cuyo núcleo, el Consejo Interterritorial, debería asumir el protagonismo y una voz única en este escenario.
Recientemente desde el CGCOM se ha realizado una llamada a que se mantenga el uso de mascarillas, aunque no sea obligatorio, en una serie de situaciones, para que la población con mayor riesgo se protejan, y para que todos colaboremos a proteger a los más frágiles. Estos hábitos de higiene respiratoria y microbiológica pueden acabar siendo muy útiles para modular la extensión de las enfermedades virales respiratorias, lo cual es fundamental en una situación de saturación de los servicios sanitarios.