Por Santiago Melo
19 de septiembre de 2025Las muertes inducidas por el alcohol han aumentado de forma constante en los últimos 25 años en Estados Unidos, con un repunte especialmente acusado durante los primeros años de la pandemia de la Covid-19. Así lo revela un estudio de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), publicado en la revista PLOS Global Public Health, que ha analizado las causas específicas de fallecimiento relacionadas con el alcohol entre 1999 y 2024.
Según los datos del informe, el número total de muertes alcanzó su punto máximo en 2021, con 54.258 fallecimientos atribuibles al alcohol. Aunque la mayoría de las muertes se produjeron por enfermedad hepática alcohólica, también se observaron casos relacionados con trastornos mentales y del comportamiento provocados por el consumo.
Uno de los hallazgos más relevantes del estudio es el incremento del 255% en la tasa de mortalidad por alcohol entre mujeres jóvenes de 25 a 34 años, que pasaron de 0,9 muertes por cada 100.000 habitantes en 1999 a 3,2 en 2024. En comparación, los hombres del mismo grupo de edad experimentaron un aumento del 188% en ese mismo periodo.
El estudio advierte, además, de una creciente reducción de la brecha de género en estas cifras. Mientras que en 1999 la tasa de mortalidad masculina triplicaba a la femenina, en 2024 la diferencia se ha reducido a una proporción de dos a uno.
La pandemia jugó un papel determinante en el agravamiento de la situación, especialmente en 2021. Durante ese año se registró el mayor aumento global de mortalidad por alcohol, impulsado por el estrés social, el aislamiento y la reducción del acceso a servicios de tratamiento.
Los autores del estudio subrayan la necesidad urgente de políticas públicas para reducir el consumo excesivo de alcohol, mejorar el acceso al tratamiento y abordar los factores sociales y económicos que agravan esta tendencia.