Las enfermeras ya pueden tratar las infecciones de orina de mujeres

Las enfermeras ya pueden tratar las infecciones de orina de mujeres mayores de 14 años que sufran esta dolencia sin complicaciones.

Así ha quedado reflejado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que ha publicado la Resolución de la Dirección General de Salud Pública y Equidad en Salud, por la que se valida una guía que facilita a este colectivo la indicación, administración y autorización de dispensación de los medicamentos. También, informa de cuándo no podrán tratar casos complejos que requieran valoración médica, como infecciones recurrentes, uso de sonda vesical o inmunosupresión. “Las infecciones del tracto urinario (ITU) complicadas afectan a personas con mayor riesgo, como embarazadas, ancianos, diabéticos o pacientes con anomalías anatómicas. En este caso, se necesita una evaluación del facultativo más profunda y no podrán ser atendidos por las enfermeras”, ha aclarado en un comunicado el Ministerio de Sanidad.

Esta guía podrá ser adaptada por las comunidades autónomas para que puedan desarrollar los protocolos que concreten la población objetivo, medicamentos autorizados y criterios de actuación. Además, se revisará cada cinco años para incorporar nuevas evidencias científicas y actualizaciones, con el fin de asegurar que las actuaciones de las enfermeras sean seguras, eficaces y estén alineadas con el uso racional de los medicamentos.

Una dolencia que afecta al 50% de las mujeres 

Las ITU son una de las consultas más comunes en Atención Primaria. Afectan al 50%de las mujeres al menos una vez en su vida, especialmente con el envejecimiento, comorbilidades o institucionalización.

Abarcan dos tipos; la cistitis y la pielonefritis. La primera es la infección de la vejiga o del tracto urinario inferior y, entre sus síntomas, destacan la disuria (dolor o ardor al orinar), la polaquiuria (necesidad de orinar con mayor frecuencia de lo normal, generalmente, en pequeñas cantidades), la urgencia urinaria, el dolor suprapúbico y la hematuria (sangre en la orina), sin prurito o flujo vaginal anormal.

En lo que respecta a la pielonefritis, es la infección del tracto urinario superior que afecta a los riñones. Su causa es la infección bacteriana y, excepcionalmente, la presencia de hongos o virus.

 

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