Los abogados de Madrid arrancan un proyecto para acabar con el tabú de la salud mental en la profesión

La abogacía es una profesión muy demandante. Los abogados se encuentran sometidos a un altísimo nivel de estrés, derivado de la alta exigencia y la competitividad que existe dentro del sector. Esto impacta negativamente en su salud mental y puede generar problemas graves como ansiedad, depresión, fatiga o, incluso, el abuso de sustancias. 

Uno de los principales obstáculos es el estigma que pesa sobre estos profesionales, que admiten sufrir trastornos de salud mental. De acuerdo con Manel Atserias Luque, presidente del Instituto de Salud Mental de la Abogacía (Isma), la mayor parte de los letrados que padecen ansiedad o depresión “no lo dirían por miedo a ser considerados abogados débiles o incapaces de defender con diligencia los derechos de los ciudadanos. Este miedo responde a un prejuicio, fruto del desconocimiento, que predispone a actitudes negativas por parte de su entorno”.

Para tratar de luchar contra este silencio, el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) presentó el pasado 4 de julio, desde la Fundación ICAM Cortina, su proyecto de Bienestar Integral, articulado en tres líneas de actuación: la primera orientada a proporcionar apoyo psicológico a los colegiados, una segunda que dotará a los despachos de herramientas útiles para atender los problemas emocionales de los profesionales y la última, dirigida a los propios profesionales del ICAM. 

El objetivo del proyecto es erradicar los tabús que rodean a la salud mental en el sector de la abogacía y se dirige principalmente a abogados que afrontan las reuniones y los juicios con excesivo estrés, muestran incapacidad para desconectar del trabajo, tienen problemas de concentración y no consiguen encontrar un equilibrio entre su vida laboral y personal. 

Dentro del programa se han habilitado dos números de teléfono gratuitos para la atención de los colegiados, uno de apoyo psicológico y otro de acompañamiento emocional y escucha activa. Estas líneas telefónicas serán atendidas por especialistas de Quirón Salud y del Teléfono de la Esperanza. Desde el ICAM señalan que, desde que se puso en marcha el proyecto el 4 de julio, ya se han recibido varias llamadas. 

Estudio sobre salud y bienestar de la abogacía española

En el año 2018, Isma publicó, junto a la editorial Lefebvre, el “Estudio sobre la salud y el bienestar de la abogacía española”. Según los datos extraídos de este análisis, los abogados identifican el estrés y la tensión como los principales factores de riesgo en el ejercicio de su profesión. 

Tomás Gabriel García Micó, vicepresidente primero del Instituto de Salud Mental de la Abogacía, afirma que, según los estudios en marcha, más del 98% de los abogados españoles consideran que el estrés es un muy elevado en la profesión. Por eso insiste en la importancia de “tender la mano a las firmas de abogados para colaborar en la mejora del bienestar de la profesión, no solo por ser necesario para las personas profesionales, sino porque redundará siempre en un beneficio para la ciudadanía quienes, al fin y al cabo, son nuestra prioridad”.

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