Por Andrea Martín
20 de diciembre de 2024El Consejo General de Enfermería (CGE) ha manifestado su total desacuerdo con la propuesta de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) de redistribuir funciones de las enfermeras entre los Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE). Según el CGE, esta medida, planteada como una solución a la falta de profesionales de enfermería en España, supone un riesgo para la calidad de los cuidados y la seguridad de los pacientes.
El organismo, que representa a más de 345.000 enfermeras y enfermeros en el país, subraya que las funciones propias de esta profesión requieren una formación universitaria de cuatro años, que puede ampliarse con especializaciones, másteres y doctorados. Sustituir a estos profesionales altamente capacitados por perfiles con menor cualificación “es poner en peligro la salud de todos los españoles”, afirmó Florentino Pérez Raya, presidente del CGE.
Pérez Raya señaló que el problema de fondo es el déficit estructural de enfermeras que arrastra el sistema sanitario en España. Según el presidente del CGE, las soluciones deben centrarse en mejorar las condiciones laborales y aumentar las plazas de formación para enfermeras, en lugar de intentar suplir esta carencia redistribuyendo funciones entre los TCAE. “La solución a la falta de enfermeras no es que estos puestos sean ocupados por otras profesiones, como insinúan los representantes de la sanidad privada, sino que las Administraciones se decidan a acabar con el déficit estructural de enfermeras que existe en España. Enfermeras y enfermeros garantizarán los cuidados de calidad en una sociedad envejecida y aquejada de enfermedades crónicas”, destacó.
El CGE también advierte que la propuesta de ASPE no solo compromete la calidad asistencial, sino que podría significar un retroceso en los avances logrados por la profesión en los últimos años. “Esta redistribución supondría una clara pérdida de las competencias enfermeras, lo que implica un retroceso en el desarrollo imparable que está experimentando la profesión. No vamos a permitir que se dé ni un solo paso atrás”, concluyó Pérez Raya.
La postura del CGE resalta la importancia de apostar por un sistema sanitario que valore y refuerce el papel de las enfermeras en la atención a los pacientes, en lugar de implementar medidas que, a su juicio, podrían comprometer la salud pública.