Analizan el plomo en sangre de los niños de Bonmatí, Girona, por contaminación

Los residentes de Sant Julià de Llor i Bonmatí (Girona), por fin han sido escuchados por la Generalitat. Después de llevar años quejándose por los fuertes olores que desprende una empresa dedicada al reciclaje de baterías, y que lleva en activo más de 60 años, el pueblo ha conseguido que el Departamento de Salud haga analíticas tanto a los niños menores de 14 años, como a las mujeres embarazas de la localidad, para determinar si tienen altos niveles de plomo en su sangre.

Desde este lunes, y hasta el jueves que viene, los consultorios de la localidad están realizando distintos tipos de pruebas a los menores para ver si este colectivo ha absorbido cantidades altas de plomo que puedan haber afectado a su desarrollo cognitivo. En la campaña ya se han inscrito 106 menores de 14 años de los 226 censados en el municipio, así como dos embarazadas.

El alcalde de Bonmatí, Marc García, ha insistido en que esta es "una petición histórica" y pide "responsabilidades" en caso de que los resultados de los análisis de plomo en sangre señalen niveles más altos de lo normal. Además, asegura que "sería una gran garantía para todos que estos controles fueran públicos y periódicos en el tiempo".

En declaraciones a la prensa, el edil también ha señalado que “tenemos una actividad de reciclaje de baterías en el pueblo y cuando sopla el viento hay fuertes olores metálicos que nos provocan picores en los ojos e irritación en la boca”.

El valor límite de concentración de plomo en sangre (plumbemia) se establece en 70 microgramos de plomo por 100 mililitros de sangre (70 µg/100 ml). En caso de que los niveles fueran altos, Salud ya ha comunicado que estudiará el origen de la exposición, ya que podría haber otros factores que ocasionen una presencia de plomo en la sangre.

Efectos para la salud del plomo 

El plomo que se encuentra en la pintura, la tierra, el aire o el agua no se puede ver a simple vista y no tiene olor. Como indica la OMS, es una sustancia tóxica que va acumulándose en el organismo y afecta a diversos sistemas. Es especialmente nocivo para los niños de corta edad. 

El plomo se distribuye por el organismo hasta alcanzar el cerebro, el hígado, los riñones y los huesos. Se deposita en dientes y huesos, donde se va acumulando con el paso del tiempo. La exposición humana se suele evaluar midiendo la concentración de plomo en sangre.

Según Pedro Gargantilla, director médico de Medicina Responsable, los niveles altos de plomo en sangre pueden afectar al sistema nervioso central (afectando al cerebro) y, también puede originar problemas de insuficiencia renal. Otros efectos en niños son problemas cognitivos o de aprendizaje y un crecimiento y desarrollo lentos, además de problemas auditivos y en el habla, como aseguran distintos expertos.

---