Por Medicina Responsable
19 de julio de 2023La consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha informado en el Parlamento andaluz que la comunidad autónoma comenzará a administrar, por primera vez, el anticuerpo monoclonal frente al Virus Respiratorio Sincitial (VRS) a todos los lactantes menores de seis meses a principios de otoño.
De acuerdo con García, Nirsevimab, cuyo nombre comercial es Beyfortus, se administrará a todos los niños que vayan naciendo desde el 1 octubre de 2023 al 31 marzo de 2023, en sus primeros días de vida, antes del alta de la planta de maternidad. También se administrará a todos los lactantes nacidos entre el 1 de abril y el 30 de septiembre de 2023. “Con esta inmunización prevenimos de forma eficaz y segura la infección por este virus, una afección respiratoria que se produce sobre todo durante el otoño y el invierno”, ha afirmado.
El medicamento será administrado en una sola dosis y por vía intramuscular y, según estimaciones de la Junta de Andalucía, durante esta campaña 2023-2024, lo podrían llegar a recibir unos 60.000 lactantes, ya que el número de nacimientos actual en esta comunidad está en torno a 5.000 de forma mensual.
Además, también se administrará en menores de un año con antecedente de prematuridad de menos de 35 semanas, así como a otros lactantes con patologías crónicas de muy alto riesgo que tengan hasta 24 meses. “Uno de los ejes en los que se fundamenta el nuevo modelo sanitario hacia el que se encamina Andalucía es la prevención. Y en este ámbito, las vacunas son claves para garantizar una mejor calidad de vida a los andaluces. La inmunización frente al VRS es de gran importancia debido a la gravedad de la enfermedad en lactantes y niños pequeños”.
El VRS es la causa más común de infecciones respiratorias graves en los niños menores de un año, y puede desembocar en complicaciones como la neumonía o la bronquiolitis. De hecho, sólo en Andalucía, a finales de noviembre del pasado año se alcanzó el pico de hospitalizaciones de menores por esta causa: un total de 301 niños ingresados, de los cuales 36 llegaron a estar en las UCI de los hospitales públicos de la región.