Por Julia Porras
9 de septiembre de 2022De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, en 2019 se suicidaron en todo el mundo más de 700.000 personas, posicionándose como la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años. De hecho, el informe de la OMS alerta de que el 58% de los suicidios que se produjeron en 2019 fueron en personas por debajo de los 50 años.
En contra de lo que pudiera parecer, la OMS señala que el suicidio no se produce exclusivamente en países de altos ingresos, sino que tiene incidencia en todas las regiones del mundo, independientemente de su poder adquisitivo. De hecho, durante 2019, el 77% de los suicidios tuvieron lugar en países con ingresos medios.
Otro dato relevante es que se suicidan más del doble de hombres que de mujeres.
¿Pero qué pasa con los jóvenes?
Entre la población infanto-juvenil ha habido un aumento de suicidios en menores de 15 años. De hecho, estas cifras se han duplicado de siete a 14 fallecimientos por suicidio en 2020. En ese año se batió el triste récord de 3.941 muertes por esta causa.
Durante ese año también aumentaron en más de un 200% las autolesiones, los trastornos de la conducta alimentaria y las ideas de suicidio, que aumentaron hasta un 250%. El suicidio es un tema estigmatizado por la sociedad, pero no puede ser un tema invisible. Hay que visibilizar, sensibilizar y acompañar a las personas con ideas suicidas. Para que salten sí, pero hacia la vida.
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